La ciudadanía evalúa con pesimismo la campaña. La percepción de un uso masivo de bots y noticias falsas es el golpe final a la promesa de transparencia del gobierno.
La encuesta CADEM N°603 ha revelado una dura verdad para el gobierno de Gabriel Boric: la ciudadanía no cree en su «nueva política». La evaluación de la campaña presidencial actual es desoladora. Un aplastante 64% de los encuestados considera que el uso de bots y cuentas falsas es peor que en campañas anteriores, mientras que el 53% opina lo mismo sobre la desinformación.
Estas cifras demuestran que, más allá de la gestión diaria, el gobierno está perdiendo la batalla por la credibilidad. La gente no solo percibe una falta de resultados, sino que también siente que los métodos utilizados para influir en la opinión pública son deshonestos. La desconfianza en la «transparencia y honestidad» del financiamiento de la política, calificada como «peor» por un 35% de los chilenos, agrava aún más este panorama.
El gobierno de Boric prometió un cambio radical, un giro hacia la honestidad y la transparencia. Sin embargo, la realidad que reflejan las encuestas es la de un gobierno que no ha logrado erradicar las peores prácticas de la política. La desaprobación se asienta, y la desilusión se profundiza, dejando en evidencia un fracaso en la construcción de una relación de confianza con la ciudadanía.